Una dieta rica en nutrientes como el omega 3 o la vitamina C pueden ayudarte a cuidar tus encías y a prevenir enfermedades periodontales. Te contamos qué alimentos debes incorporar a tu dieta para mantener unas encías sanas.

La encía es uno de los tejidos fundamentales de la cavidad oral ya que soporta y mantiene al diente adherido al hueso maxilar. Por ello es importante tener una buena salud gingival. Si además de visitar periódicamente a tu dentista mantienes una dieta que contribuya al cuidado de las encías podrás prevenir problemas como la enfermedad periodontal o la gingivitis. Una dieta rica en antioxidantes y vitaminas contribuyen de manera efectiva al cuidado gingival.

Alimentos ricos en Omega 3.

El Omega 3 es una ácido graso capaz de reducir los niveles de inflamación. Estudios científicos han demostrado la mejora de la enfermedad periodontal tras consumir alimentos que contienen este ácido graso. El Omega 3 es una sustancia que el cuerpo no puede generar por sí mismo, y está presente en alimentos como las nueces y el pescado azul (atún, arenques, sardinas…) El pescado azul también es rico en vitamina D. Esta vitamina facilita la absorción de calcio y fósforo y hace que nuestras encías sean más resistentes a infecciones.

Alimentos con vitamina C.

La vitamina C ayuda a mantener el colágeno de las encías y es capaz de crear un ambiente adverso para la proliferación de bacterias. Hay alimentos con un alto contenido de esta vitamina, como los frutos rojos (fresas, arándanos, moras, frambuesas…) lo cítricos, el kiwi o las uvas. No obstante, su consumo ha de ser moderado ya que la acidez de la vitamina C tiene un efecto abrasivo sobre el esmalte dental haciendo que los dientes sean más proclives a padecer caries o sensibilidad dental.

Otros alimentos.

Bebidas como el té verde contienen catequina, un antioxidante que reduce las bacterias que se adhieren al diente y que poseen capacidad inflamatoria. Su consumo está relacionado con la reducción de las enfermedades inflamatorias como la gingivitis, y las enfermedades cardiovasculares.

El tomate posee una sustancia, el licopeno un antioxidante que posee también propiedades antiinflamatorias. Además, tiene un alto contenido en vitamina C, lo que contribuye a la reducción de bacterias.

Probióticos.

Alimentos probióticos como el yogurt natural poseen microorganismos vivos que tienen efectos beneficiosos: aumentan las capacidades de defensa de las encías contra las bacterias que provocan inflamación.