La ortodoncia es uno de los tratamientos dentales más populares y utilizados por los resultados que ofrece tanto a nivel estético como funcional. Pero realmente se conocen todos los beneficios de la ortodoncia. En este post queremos contarte los diferentes problemas dentales que se pueden solucionar gracias a ella.
Cuando se habla de ortodoncia se piensa, habitualmente en jóvenes -normalmente adolescentes- portando los conocidos brackets. Y cierto es que en esa edad, durante la adolescencia, el tratamiento de ortodoncia resulta especialmente indicado ya que la dentadura definitiva ha erupcionado, por lo que se puede realizar una adecuada corrección definitiva de los dientes del paciente. De esta forma se pueden prevenir problemas en el futuro.
Pero la ortodoncia no está indicada únicamente a esa edad. Cualquier persona adulta, en cualquier momento de su vida, puede llevar ortodoncia para mejorar su sonrisa y alinear sus dientes.
Esta es precisamente la función de la ortodoncia: colocar los dientes en la posición adecuada, de forma que «encajen» perfectamente.
Los dentistas especialista en ortodoncia utilizamos una serie de términos para referirnos a los «desajustes» en los dientes o «maloclusiones». Dependiendo del tipo, existen varias clasificaciones:
- Sobremordida: Se produce cuando las coronas de los dientes superiores cubren los dientes inferiores.
- Submordida: Al contrario de la anterior, los dientes inferiores cubren a los superiores. Es la típica persona que nos recuerda a un perro «bulldog».
- Mordida cruzada: En una mordida normal, los dientes superiores se encuentran ligeramente por delante de los inferiores. En este tipo de mordidas, esto no sucede, es decir, los dientes superiores están ligeramente por dentro de los inferiores.
- Mordida abierta: Este es el caso en que al cerrar la mandíbula, es decir, al morder, los dientes superiores e inferiores no se cruzan, dejando un gran espacio entre ambos.
- Desplazamiento de la línea media: Cuando dientes superiores e inferiores no coinciden en el caso de imaginar una línea en el centro de los dientes que los divida de forma vertical.
- Diastemas: Espacios demasiado grandes entre los dientes.
- Apiñamientos: Se producen cuando los dientes no encuentran espacio suficiente y se «montan» unos sobre otros.
¿Por qué es importante solucionar estos problemas con la ortodoncia?
El primer motivo -pero quizá no el más importante- es el estético. Tener unos dientes con algunas de estas características no nos permite tener una sonrisa armoniosa y este tipo de disfunciones afectan a la estética general del rostro. Una persona que mejora su sonrisa mejora toda su imagen.
Pero hay más motivos. Y los más importantes tienen que ver con la salud bucodental ya que unos dientes mal alineados generan, a la larga muchos problemas. Los más frecuentes son:
- Alteraciones de la articulación temporomandibular (ATM). Al «encajar» mal los dientes, la articulación de la mandíbula sufre en exceso.
- Desgaste dental. Si los dientes están mal colocados «chocarán» en zonas inadecuadas, por lo que tenderán a desgastarse en exceso.
- Caries. La mala colocación de los dientes dificulta la higiene oral y el desgaste mayor hace que los dientes pierdan el esmalte y sean más propensos a padecer caries.
- Enfermedad periodontal. La mala higiene y el incorrecto ajuste de los dientes acaba afectando a las encías, que pueden padecer gingivitis o periodontitis.
¿Necesitas más motivos para llevar ortodoncia?
Dr. Humberto Arias. Odontólogo. Clínica Odontológica Integral.
NOTA: Todos nuestros posts tienen un carácter informativo y divulgativo, y nunca sustituyen a la consulta con tu dentista.