Las muelas del juicio, terceros molares o cordales, son un resto de nuestra evolución como especie, ya que nuestros antepasados tenían una mandíbula más desarrollada y, por tanto, con  sitio para que pudieran aparecer. Hoy en día, no siempre están presentes en todas las personas y, en algunos casos, pueden provocar problemas de movilidad en el resto de piezas dentales.

¿Cuándo aparecen las muelas del juicio?

Su aparición suele producirse entre los 17 y 21 años, por este motivo reciben el nombre de muelas del juicio, ya que coinciden con la mayoría de edad o madurez.

No todos los individuos tenemos muelas del juicio, o al menos, no en todos se manifiestan de forma visible.

Pueden darse tres situaciones:

  •  Que no aparezcan. Lo que se puede saber a través de una radiografía panorámica de la boca.
  •  Tener muelas del juicio, pero que no que erupcionen (cordales incluidos), y por tanto no se puedan ver ya que quedan «enterradas» bajo la encía.
  • Que erupcionen y que sean visibles en la boca, total o parcialmente.

¿Cuál es la función de las muelas del juicio?

Como hemos dicho, se trata de un resto evolutivo y, por tanto, en la boca de nuestros ancestros tuvieron la misma función que el resto de muelas: triturar los alimentos.

Esto puede seguir ocurriendo hoy en día en el caso de que se dé una erupción completa y correcta de los cordales.

Sin embargo, si no erupcionan o lo hacen de forma inadecuada, no podrán cumplir con esta función.

¿Hay que sacarlas?

No siempre es necesario.

En el caso de que puedan cumplir con la función masticatoria no sería necesaria su extracción, pero sería importante realizar una cuidada higiene dental ya que se encuentran en una parte de difícil acceso. Si no se limpian adecuadamente, estas muelas serán más propensas a acumular placa bacteriana y a padecer caries.

Si erupcionan de forma inadecuada, empujando o tropezando con las piezas adyacentes, será necesario extraerlas para evitar que se produzcan cambios en la posición del resto de dientes. Esto suele ser más común en las piezas inferiores.

Por último, puede ocurrir que al no erupcionar no den ningún problema y, por tanto, pueden mantenerse, aunque será necesario realizar periódicamente un seguimiento radiográfico para supervisar su evolución.

¿Siempre dan problemas? 

Además de los mencionados problemas de apiñamiento con otros dientes, las muelas del juicio suelen molestar durante su erupción. En este periodo los tejidos que rodean a la muela (encía y mucosa oral) sufren una serie de transformaciones que pueden dar lugar a irritación, dolor e incluso inflamación.

Mientras la muela del juicio está erupcionando hay que realizar una exhaustiva higiene oral ya que los tejidos blandos forman un capuchón o cápsula que rodea a la muela, donde pueden acumularse restos de alimentos dando lugar a la proliferación de bacterias.

Si no se realiza una adecuada higiene, el resultado será una infección con dolor e inflamación que puede afectar a la apertura de la mandíbula, o trasladar el dolor al oído, al ojo, a la cabeza, a la base de la boca o a la garganta.

¿Qué hacer?

Lo primero que tienes que hacer es acudir al dentista en caso de que notes molestias en la parte anterior de la boca.

O simplemente, entre los 17 y 21 años realizar una radiografía para detectar su presencia y que tu dentista puede realizar una valoración.

Actualmente los dentistas podemos aconsejar o no su extracción, dependiendo de cada caso que hay que analizar con una radiografía de la boca. El criterio general es tratar de evitar problemas futuros, sobre todo malposiciones y alteraciones en la alineación del resto de piezas dentales.

¿Es doloroso sacar las muelas del juicio?

En algunos casos el procedimiento puede ser complejo debido a la posición de la pieza ya que se encuentra en la parte anterior de la mandíbula, lo que pueden hacer complicada su extracción (sobre todo de las muelas del juicio  inferiores).

Aún así, has de saber que  la extracción en la consulta del dentista no resulta dolorosa gracias a la aplicación de anestesia, aunque sí puede haber molestias tras la cirugía. Para prevenirlas, nuestros dentistas en Gijón te indicarán la medicación adecuada para evitarlo, así como algunos consejos que pueden hacer en casa y que ayudarán a la cicatrización de la zona.

Dr. Humberto Arias Fonseca. Odontólogo. Director de Clínica Odontológica Integral. Gijón.

NOTA: Todos nuestros posts tienen un carácter informativo y divulgativo, y nunca sustituyen a la consulta con tu dentista.

Imagen: Shutterstock.com / ShutterDivision