El cuidado de los dientes también es cosa de mayores. Alcanzar la vejez con una buena salud oral y sin pérdida de piezas es un factor clave que redunda en una mejor calidad de vida.
Si eres una persona mayor, estarás de acuerdo en que llegar a la vejez con una boca sana es un factor que favorece una mejor calidad de vida.
Seguro que ahora valoras mucho más el cuidado de tus dientes. Pero también es posible que tengas que enfrentar nuevas situaciones o problemas que antes no tenías.
El paso del tiempo hace mella en la salud bucodental. Y el cuidado que hayas tenido con tu dentadura y los tratamientos recibidos a lo largo de tu vida, también determinan el estado en que se encuentra tu boca en esta etapa vital.
Problemas bucodentales de los mayores.
Edentulismo:
La falta de piezas dentales es un problema habitual en las personas mayores. Puede ser debida a diferentes motivos: caries no tratadas, extracciones, pérdida de dientes por periodontitis, lesiones… Este problema puede solucionarse mediante prótesis soportadas sobre implantes dentales o bien mediante prótesis removibles (de quita y pon).
Has de tener en cuenta que la pérdida de una pieza dental puede afectar a resto de dientes, provocando su movilidad. Por lo que sustituir las piezas dentales perdida beneficiará a toda tu boca.
Periodontitis:
La enfermedad periodontal es un problema de las encías muy común en personas mayores. Afecta a más de la mitad de las personas entre 65 y 74 años de edad.
Suele comenzar manifestarse a partir de los 40 años de edad con inflamación, sangrado y retracción de las encías.
Si no se ha tratado convenientemente, la enfermedad periodontal acaba reduciendo la masa ósea que soporta al diente, provocando su pérdida.
La presencia de gingivitis está también asociada a enfermedades cardiovasculares y a la diabetes. Así que si tienes alguno de sus síntomas, lo mejor es que acudas al dentista cuanto antes para ponerle solución.
Caries:
El problema de la caries se agrava durante la vejez debido a varios motivos.
Por un lado, el paso del tiempo y el desgaste de los dientes hace que estos sean más vulnerables a esta enfermedad.
Además, la retracción de las encías debido a la gingivitis puede dejar al descubierto la corona dental que también puede sufrir de caries más fácilmente.
Un buena higiene dental te ayudará evitar la caries.
Xerostomía:
Los dentistas utilizamos esta «palabreja» para referirnos al un descenso del flujo o producción de saliva.
Este problema es habitual en las personas mayores y es muy importante hacer lo posible para estimular su producción.
El motivo es que la saliva equilibra el ph (acidez) de la boca lo que evita la proliferación de bacterias y frena la aparición del sarro.
Hay algunos trucos muy sencillos para ayudarte.
Bebe abundante agua.
Saborea algún caramelo sin azúcar de forma regular.
También puedes chupar un trozo de hielo, salvo que te cause sensibilidad dental.
Como complemento a tu cepillado, utiliza un enjuague bucal fluorado para controlar las bacterias que habitan en la boca.
Desgaste dental:
Tus dientes llevan muchos años haciendo su función. Así que es normal que estos se hayan desgastado.
El desgaste dental debilita tus dientes y los hace más vulnerables a padecer caries, a roturas o fisuras.
Protegerlos del desgaste dental es muy importante para mantener tu salud oral. Lo puedes hacer utilizando una férula de descarga durante la noche.
Cuida de tu prótesis dental
Si eres usuario de prótesis dental (dentadura postiza) tendrás que cuidarla de forma regular.
Ten en cuenta que la dentadura es un elemento diseñado de forma anatómica para que se adapte a tu boca y transmita las fuerzas que se ejercen durante la masticación.
Por este motivo debe estar bien asentada. Si notas que te produce alguna molestia o roce, visita a tu dentista para que haga los ajustes necesarios.
Para mejorar su estabilidad puedes utilizar un fijador, lo que aumentará la fijación y la fuerza de la mordida.
Si tu prótesis no está bien ajustada, los restos de alimentos pueden quedar atrapados en tu boca, lo que aumenta la proliferación de bacterias y puede provocar mal aliento.
Cuida tu prótesis dental. Sumérgela diariamente en un vaso con agua y un limpiador efervescente en pastilla. Así eliminarás las bacterias y hongos y la mantendrás limpia sin dañarla.
Recuerda limpiar tu boca también de forma diaria. Utiliza un cepillo dental de cerdas suaves para masajear y limpiar tus encías. Además, recuerda limpiar también diariamente tu lengua para reducir la presencia de bacterias.
¿Cuándo visitar al dentista?
Haz una visita a tu dentista cada seis meses. Él hará una revisión del estado de tu boca y te dará los mejores consejos para mantenerla saludable.
Pero también debes acudir si notas alguno de estos síntomas: dolor, movilidad en los dientes, sensibilidad, sangrado de encías, boca seca o halitosis (mal aliento).
Nuestros consejos
En esta etapa de la vida se produce una menor secreción de saliva, por lo que es muy importante beber abundante agua.
Es posible que la edad avanzada limite tu destreza a la hora de cepillarte los dientes, utiliza un cepillo de dientes eléctrico.
Visita al dentista dos veces al año para que revise el estado de tu dientes y tus encías.
Cepíllate los dientes dos veces al día.
Utiliza la seda dental. Si no te resulta fácil, emplea un irrigador dental.
Usa un colutorio dental.
Dr. Humberto Arias Fonseda. Odontólogo. Director de COI.
NOTA: Todos nuestros posts tienen un carácter informativo y divulgativo, y nunca sustituyen a la consulta con tu dentista.
Imagen: shutterstock