¿Cuáles son los efectos del cigarrillo electrónico en la salud oral? Los pacientes que están dejando de fumar y prueban a cambiar de hábito con el cigarrillo electrónico han de saber que este producto puede tener efectos negativos sobre la salud de la boca, aunque algunos de ellos todavía no están claros.
El cigarrillo electrónico es un nuevo producto que está siendo usado por las personas que deciden dejar el hábito del tabaco. Este nuevo cigarrillo es en realidad un dispositivo electrónico que genera vapor con nicotina a partir de un cartucho que contiene esta sustancia mezclada con un líquido. Una de las supuestas ventajas del cigarrillo electrónico es que no genera humo ni cenizas. Al no haber combustión no se produce monóxido de carbono; tampoco contiene alquitrán, y carece de buena parte de las 4.000 sustancias que puede llegar a contener un cigarrillo tradicional (el 30% de ellas se consideran nocivas).
El cigarrillo electrónico se utiliza como sustituto del cigarrillo convencional ya que aporta al usuario una cantidad de nicotina necesaria para aliviar su adicción a esta sustancia. La cantidad de nicotina depende del tipo de cartucho que se utilice, los hay que incluso no llevan esta sustancia y solo aportan el vapor de agua y otras sustancias, como saborizantes. En este caso el cigarrillo ayuda a satisfacer (y mantener) el ansia por fumar gracias a la aspiración del vapor que genera.
Efectos para la salud.
Un estudio realizado por la Organización Mundial de Salud en 2010 analizó las sustancias que contenían 18 variedades de cartuchos para cigarrillos electrónicos en los que se detectaron “niveles de nitrosaminas, compuestos específicos del tabaco que son cancerígenos conocidos”. El informe también señala que en algunos de los cartuchos que se anunciaban sin nicotina, sí contenían esta sustancia en diferentes cantidades.
La Facultad de Medicina Dental de la Universidad Laval en Quebec (Canadá) ha realizado los primeros estudios sobre la incidencia del e-cigarrillo en la salud oral. El resultado del análisis del vapor generado por estos dispositivos es que contiene elementos similares a los del cigarrillo normal, como alquitrán. Además, su uso expone a los tejidos orales a compuestos que resultan del calentamiento de la glicerina, el propilenglicol, la nicotina y de aromatizantes.
La revista Journal of Cellular Physiology ha estudiado el efecto del e-cigarrillo en las células epiteliales de la cavidad oral que sirve de primera línea de defensa de la boca frente a bacterias. La tasa de muerte celular en una boca normal se situó en el 2%, mientras que en una boca sometida a «vapeo» se elevó hasta un 18% el primer día, un 40% el segundo, y un 53% el tercer día. Los daños en esta «barrera» natural de la boca incrementan los riesgos de infecciones, inflamación y de enfermedades periodontales.
Por su parte, el Centro Médico de la Universidad de Rochester ha comprobado que el vapor de estos dispositivos hace que las células generen proteínas inflamatorias, lo que puede conllevar la aparición de enfermedades bucodentales.
La FDA ha extraído muestras de nitrosaminas (un compuesto orgánico carcinogénico), así como dietilenglicol (un anticongelante tóxico).
Por último, el Instituto Nacional de la Salud Pública y el Medio Ambiente de Holanda ha asegurado que el cigarrillo electrónico no es menos dañino que el cigarrillo convencional, y que puede provocar irritación, mareos y náuseas. Además, recuerda que el consumo de nicotina es dañino para el feto en el caso de las mujeres embarazadas.
Dr. Humberto Arias. Odontólogo. Director de Clínica Odontológica Integral. Gijón.
NOTA: Todos nuestros posts tienen un carácter informativo y divulgativo, y nunca sustituyen a la consulta con tu dentista.